Un recorrido por la historia
Visitar un barrio es visitar a sus habitantes, y en el caso particular de La Merced, sus viviendas están llenas de tradición y hospitalidad. La mañana inicia con las ventas en el atrio del templo a pocas cuadras y el olor a cera, flores y comida es singular. Luego de la rigurosa visita se puede dar una vuelta por las cercanías e ingresar a la venta de súchiles, en casa con techo de teja y paredes gruesas, el tiempo parece detener-se y la elaboración de la bebida (aunque también se puede pedir tiste y chinchivir), es la manera ideal para que sorbo a sorbo nos enteremos de las nuevas del barrio y nos alistemos para recorrer los callejones.
Una señorial ventana de esquina es la muestra palpable de la importancia de las familias del barrio, un portón de madera con portal de piedra nos da el ingreso a otra de las viviendas representativas del sector. La distribución de las habitaciones y el patio nos separan del ruido exterior, el típico ambiente de las casonas del centro se percibe en estas construcciones del siglo XIX.
Continuamos la caminata y otra antigua vivienda abre sus puertas y una sonrisa cálida nos recibe. Aún cuando de líneas sencillas, no podemos confundirnos, estamos en un sitio peculiar que mezcla no solamente la esencia de vida en el centro de la ciudad, sino su historia… una sala llena de libros nos habla sin duda alguna de “El Escribiente” y es que el centro tiene abolengo y muchas anécdotas por contar, hasta parece que aún suena como inspiración el Jazz y la distancia infranqueable del océano no es impedimento para sentir la presencia de tan afable poeta y dramaturgo, porque su casa sigue siendo aún un encuentro con el arte.
La 10ª avenida “A” nos muestra interesantes fachadas y algunos in-muebles que hoy sirven de sitio de reunión a bohemios y vecinos, y hoy lleva el nombre en honor del miniaturista Francisco “El Fino” Cabrera, grabador y corrector de La Casa de la Moneda en la primera mitad del siglo XIX. La arquitectura residencial del Barrio de La Merced posee cierta homogeneidad, y aunque la diversidad es el punto de unidad, podemos decir que las fachadas a paño y la tipología de habitaciones alrededor de uno o varios patios, típico modelo colonial, sigue siendo el común denominador.
Una fábrica de hielo esconde un tesoro en su interior, techos de cinc prensado y pisos de cemento líquido son el complemento perfecto de preciosos murales bucólicos pintados a mano.
Tipología Arquitectónica
Los corredores, dependiendo de las dimensiones de los predios tienen diversas formas, y a partir de la distribución en “L”, a la cual se agregan habitaciones generan formas en “F” y “E”. Las habitaciones más importantes están dispuestas alrededor del primer patiol y existe un patio secundario de servicio con pila. El comedor divide el área social del área de servicio y en las viviendas con mayor tamaño se encuentra también un tercer patio que sirve de huerta o jardín.
Fachadas
Las fachadas, definidas por decoraciones de variada influencia estilística, habilitan el ingreso y se rigen por las necesidades de iluminación y ventilación. Los ingresos varían según el perímetro del terreno, el predominante es el ingreso por el zaguán hacia el patio. En el caso de las fachadas más amplias, éstas presentan más de un ingreso, incorporando entradas peatonales hacia los ambientes principales. El diseño es rítmico, aunque no sigue cánones definidos.
Materiales y Sistemas Constructivos
Los sistemas y materiales constructivos varían de acuerdo a la época de construcción, el tipo de inmueble y los recursos económicos de la familia. Las edificaciones construidas con ladrillo y concreto reforzado poseen cimiento corrido de concreto reforzado. Las de adobe tienen cimiento de piedra, cal y canto o adobe con rafas de ladrillo.
Pisos y Muros
En las viviendas tradicionales destacan los pisos “alfombra” o de cemento líquido son peculiar muestra del diseño de la época, principios del siglo XX de gran colorido y figuras geométricas. Los inmuebles más antiguos tenían piso de baldosa de barro. Mientras tanto, en muros, el adobe aún se encuentra en algunas fachadas, colindancia y en el muro principal en el corredor.
Cubiertas y Cielos Rasos
Algunas cubiertas de teja aún pueden observarse desde la bóveda del templo de La Merced, en estos casos las cubiertas inclinadas poseen internamente un artesonado de madera, existen casos especiales con machihembres decorativos, y algunos con lámina de cinc prensada.
Puertas y ventanas
Los materiales predominantes son la madera y el vidrio. En algunos inmuebles se encuentran marcos decorativos y sobre ventanas o sobre puertas, así como balcones en el exterior. En las casas más ornamentadas se puede encontrar vidrio de diversos colores, decorados texturizados y ebanistería de alta calidad. Entre los inmuebles con carac-terísticas tradicionales e historicistas es común que las habitaciones tengan puertas que permiten la comunicación entre ellas y hacia los servicios sanitarios. |